RESUMEN:
Desde el desconfinamento causado por la pandemia de al Covid-19, el verano del 2020, varias pozas de la provincia de Girona han detectado la problemática de la masificación. Las sobrefreqüentación de los espacios fluviales durante los meses de verano comporta graves impactos en el estado de conservación del espacio.
Algunos de estos espacios contienen hábitats de interés prioritario y especies de fauna y flora protegidas, y el impacto que genera la carencia de regulación a nivel de ecosistema (desechos, contaminación acústico, erosión, eutrofización del agua, especies invasoras...) provoca un desplazamiento o desaparición de las especies más frágiles y consecuentemente una pérdida de riqueza y biodiversidad.
Con el objetivo de homogeneizar la gestión del uso público en todos los espacios que comparten esta problemática en la Provincia de Girona, se ha coordinado un dispositivo que incluye 13 espacios diferentes:
- Ribas baja del río Ter
- Canet d'Adri
- Sant Llorenç de la Muga
- Santa Pau
- Beget (Camprodon)
- Vall d'en Bas
- Vidrà
- Albanyà
- Sadernes
- Sales de Llierca
- Riudaura
- Vall de Bianya
- Riu Brugent (Planes d'Hostoles i Sant Feliu de Pallerols)
El objetivo del dispositivo es, pues, coordinar los informadores ambientales, en aquellos espacios donde los hay, asesorarlos en su tarea de información y recogida de datos, así como con la gestión y notificación de incidencias, y asesorar los municipios que tienen un plan de uso público en su implementación.